Causas de Apendicitis en niños
La apendicitis una urgencia común en la infancia, ocurre cuando el apéndice se tapa, se inflama y se infecta. Requiere Cirugía siempre.
¿Qué desencadena la apendicitis en niños?
La causa principal es la obstrucción de la luz apendicular (el interior del apéndice). Cuando esta apertura se bloquea, el moco y las secreciones normales no pueden salir, lo que genera un aumento de presión dentro del órgano, dificulta el flujo sanguíneo y permite que las bacterias se multipliquen, causando inflamación e infección.
Estas son las causas más frecuentes de esa obstrucción en los niños:
| Causa | Mecanismo |
|---|---|
| Hiperplasia linfoide | La causa más común. El tejido linfoide en la pared del apéndice crece en respuesta a una infección (gastrointestinal, viral o bacteriana) y termina tapando su salida. |
| Fecalitos | Pequeñas masas duras de heces que se forman y atascan el interior del apéndice. |
| Cuerpos extraños | En raras ocasiones, semillas, parásitos intestinales u otros objetos pequeños pueden causar el bloqueo. |
| Infecciones | Ciertas infecciones virales o bacterianas pueden desencadenar la inflamación directa o la hinchazón del tejido linfoide. |
Factores de riesgo en la infancia
- Edad: Es más frecuente en niños entre 10 y 19 años, aunque puede ocurrir a cualquier edad.
- Antecedentes familiares: Tener un familiar cercano que haya tenido apendicitis puede aumentar ligeramente el riesgo.
- Infecciones gastrointestinales previas: Pueden dejar el tejido linfoide inflamado y más propenso a obstruir.
Señales de alerta clave en niños
Es fundamental reconocer los síntomas para actuar con rapidez. Si su hijo presenta estos signos, busque atención médica inmediatamente:
- Dolor abdominal persistente: Suele comenzar alrededor del ombligo y luego desplazarse a la parte inferior derecha del abdomen. Se vuelve constante y agudo.
- Fiebre baja que puede empeorar a medida que la afección progresa.
- Náuseas y/o vómitos.
- Pérdida de apetito.
No le dé laxantes o analgésicos a un niño con sospecha de apendicitis, ya que pueden empeorar la situación. El tratamiento habitual es la apendicectomía, una cirugía para extirpar el apéndice, que es un procedimiento de rutina y muy seguro. Un diagnóstico y tratamiento tempranos son esenciales para prevenir complicaciones graves como la perforación del apéndice.